Muchas veces cuando vamos a comprar ropa nos frustramos porque no encontramos lo que nos queda bien, compramos y luego no usamos porque no nos sentimos cómodas. Y reiteramos el mismo error. Lo que ocurre es que hay que conocer nuestro cuerpo y los cortes que van mejor con él para poder ir en búsqueda de eso, no perdemos tiempo, nos vamos a sentir divinas y la prenda la podremos usar por largo tiempo. Los pantalones es una de las prendas más conflictiva, elegí el tuyo según tu cuerpo:

  • Mucha cadera: Aquí se generan muchos problemas. Sobre todo cuando la línea de los hombros es más angosta que las caderas ya que se genera un desbalance. En esta caso, afuera los chupines. Decile sí a los oxfords (si sos petisa usá tacos), también a los palazzos sin pinzas. Buscá cintura anchas, descartá las finitas y sin estructura.
  • Poca Cadera: Muy chiquita, a veces en la misma línea que la cintura y a veces con la línea de hombros más ancha que las caderas. Aquí hay que optar por pantalones con pinzas y pliegues que generen volumen. Los tipo portafolios. También animate a los estampados con motivos grandes. Y cinturas altas.
  • Piernas cortas: Un no rotundo a los capris. Todos los pantalones deben llegar hasta el suelo, si es pantalón ancho, o bien hasta el tobillo si usamos un recto. Elegí cinturas altas y con un único color o estampado. Todos estos detalles harán que te veas mucho más estilizada sin necesidad de usar tacos.
  • Pancita: Si te molesta un poco la pancita a la hora de vestir el pantalón te sugerimos que siempre los elijas con cintura media-alta, las cinturas bajas no son beneficiosas para nadie y menos aquí.  Géneros que posean estructura, nada de telas como modal o lycra, aunque pueden ser telas que posean spandex. Es preferible que se adhiera al cuerpo antes de que quede flojo, y la sugerencia es usar una blusa holgada encima para disimular.

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